Tendemos a considerar la ingeniería civil como un mundo totalmente ajeno al de la arquitectura y viceversa, pero lo cierto es que ambas disciplinas se ven las caras más de lo que podría parecer. A priori uno puede llegar a pensar en lo arriesgado que puede llegar a tornarse un proyecto así, sobre todo si tenemos en cuenta que, en algunos contextos, aún sigue costando lo suyo tener un BIM realmente operativo tanto en proyectos de arquitectura como de infraestructuras.
Vale, sí, luego están los chinos, que son capaces de construir una estación de tres, pero sus secretos permanecerán velados, pues en alianzaBIM nunca se nos ha dado bien el mandarín. Lo único que podemos inferir de proezas así es que, de ser aplicado con destreza (y un buen chorro de yuanes), el BIM puede ser mágico. Sin embargo, resolver la complejidad de un proyecto que fusione ambas disciplinas es algo que también se hace en nuestras fronteras, y con tanta pericia como en China.
La estación de Usurbil, en Donosti
Conducido por el Technical Sales Specialist de Autodesk, Camilo Jiménez, el quinto episodio de la serie BIMFRA acogió a los ingenieros Elisabeth Luengo y Guillermo Salazar, ambos expertos BIM en TYPSA y miembros del equipo que acometió el proyecto de renovación de la Estación de Usurbil, en el País Vasco.
La estación, un edificio de estilo regionalista vasco, se encuentra a un lado de este núcleo urbano donostiarra, tiene dos vías y un apartadero, una en el lateral y otra en el central. El cliente: Euskal Trenbide Sarea (ETS), el gestor ferroviario de Euskadi.
“El alcance del proyecto incluía la demolición previa de una pasarela existente que pasaba por encima de una carretera nacional y que permitía el acceso de los ciudadanos a las inmediaciones. A posteriori había que hacer un nuevo edificio estación, una nueva pasarela urbana y había que renovar la playa de vías. Obviamente al demoler todo eso, hay que urbanizar de nuevo a ambos lados de la estación y volver a reponer los servicios anexos.
En definitiva, un proyecto de bastante complejidad que ya había sido realizado en 2010 pero, debido a algunos errores, que no salió a concurso hasta 2020, año en que comienza a adaptarse el flujo de trabajo en torno al manual BIM de la ETS. El pliego de la oferta pedía diferentes Usos BIM, como la coordinación 3D o el modelado de las condiciones existentes. Además, la autoridad de diseños fue requerida y se pedía la obtención del 60% de las mediciones de los modelos. Por último, explicaba Guillermo Salazar, se ofreció el modelo en realidad virtual como método de revisión del proyecto.
“Para el modelo de condiciones existentes hicimos un escaneado láser de la zona Era muy importante tener bien modelada la pasarela existente y el entorno, pues era el lugar previsto para construir la nueva estación.
Luego, toda la zona se modeló en Revit y Civil·3D. Concretamente, explicaba Salazar, se obtuvieron los planos para edificar y las infraestructuras y servicios urbanos, desde civil 3D. La coordinación 3D se hizo generando los modelos a partir de ambos softwares, exportándolos en IWC al modelo federado en Navisworks. A partir de aquí se estimaron los presupuestos de todos los modelos de Revit y Civil 3D a través del plugin Cost-it de Presto y por último se hizo una revisión de diseño usando el Prospect de Iris VR.
¿Cuáles fueron los retos más importantes?
Según los expertos de TYPSA, “el reto más complicado fue la coordinación de servicios afectados como los nuevos que teníamos que proponer para la nueva estación. Había muy poco espacio y muchos servicios e instalaciones que tenían que pasar por ahí. Teníamos dos zonas calientes muy diferenciadas que era el paso bajo las vías, pues tenían que seguir trabajando y operativos”. Ese trabajo de análisis de fases de obra para que los andenes siguieran siendo efectivos fue un reto importante.
Otro tuvo lugar en la zona entre el ascensor y la cimentación de la pila de la pasarela era muy estrecha. Por allí tenían que pasar varios servicios como Iberdrola, saneamiento y telecomunicaciones. Al principio nos chocaba todo con todo y ahí tuvimos que jugar con las teorías y demás. Para el proceso de modelado de estos servicios se realizó todo en Civil3D, con el módulo de tuberías, pero se nos quedaba corto para cubrir el resto de los servicios. Fue ahí donde usamos la herramienta “Subassembly Composer” de Civil3D que permite crear subensamblajes personalizados en lugar de los que trae Civil por defecto. Esto era mucho más cómodo porque metíamos las variables que nos interesaba. Utilizamos estas secciones también para medir volúmenes de excavación y de diferentes tipos de relleno.
Un tercer reto tuvo que ver con el diseño de la playa de vías y el andén en Civil3D. En sí, los andenes son equidistantes respecto a las vías, que no son horizontales, sino que tienen inclinación y curvatura. Dependiendo de estos dos últimos factores, la distancia entre el tren y el andén varía. Para poder solventar estos requerimientos decidimos que la mejor manera era modelar el andén en Civil3D. Sin embargo, las estructuras las modelamos en Revit, para poder disponer de un diseño horizontal. Las diferencias dependientes resultantes de este proceso “se absorbían mediante la losa de determinación del andén, realizada en Civil3D con el subensamblaje personalizado”.
Además, explicaba Elisabeth Luengo, “había zonas donde se tenían que rellenar balastros sin tocar las vías, cosa que nos obligó a crear nuestros propios ensamblajes para cada zona de modelado. Supuso un reto importante lograr que funcionaran de forma correcta tanto con peraltes como con diferentes offsets sin que colisionaran con el resto de condicionantes”.
¿Cómo se extrajeron las mediciones?
Como hemos visto, en el proyecto de Usurbil había una clara diferenciación entre los modelos de Revit y los de Civil3D, es decir, entre arquitectura, instalaciones y estructuras y los modelos de infraestructura, como la playa de vías y los servicios. ETS exigía poner a cada elemento parámetros específicos para el código de partida, que podían tener un código o varios. Con Cost-IT enlazamos después esas mediciones con el presupuesto base. De esta forma obtuvimos el presupuesto tanto de la parte de estructuras como de infraestructuras.
Por otro lado, “las mediciones en Civil3D se realizaron mediante Navisworks y tablas de planificación. Extraíamos las mediciones en un Excel para luego meterlas a mano en el software de presupuestos.
“En este proyecto tratamos de hacer algo diferente ya que la conexión directa entre civil y un software de presupuestos no existía en ese momento. Una vez extraídos, los sólidos en Civil3D, insertamos todos los parámetros y códigos de presupuestos con un pequeño script de dynamo que usamos para introducir de manera automática cada uno de ellos en una capa diferenciable. Mediante un excel correlacionamos todos los elementos iguales en una capa con su partida de presupuestos. Una vez teníamos esta extracción, la exportamos a un IFC que a su vez se importaba en Revit. Con esto conseguíamos que Revit leyera los sólidos como objetos genéricos y mediante la herramienta Cost-it los exportamos al presupuesto”, explicaba magistralmente Luengo.